El sábado 9 de abril a partir de las 10 de la mañana se realizará la asamblea ordinaria de memoria y balance del SiPreBA que, luego, asumirá la forma de una asamblea extraordinaria para discutir un plan de lucha por el salario.
La Asamblea se realiza a días de una primera medida de acción bajo la forma de una jornada de lucha de prensa escrita el pasado jueves que buscó unificar las medidas que ya venían adoptando los trabajadores de Clarín, Página/12, Editorial Perfil y El Cronista Comercial con ceses de tareas de dos y tres horas y asambleas en reclamo de adelantos en las cuotas pautadas en la paritaria 2021-2022 e incluso, como en El Cronista, aumentos salariales del 25% por fuera del acuerdo general para recomponer parte de la pérdida del poder adquisitivo del salario acumulada en el gremio. El viernes Página/12 profundizó las medidas con un paro de 24 horas.
Es que, como resultado de la negativa del Ministerio de Trabajo y las patronales de prensa de conceder la participación en la paritarias y la personería al legítimo representantes de los trabajadores de prensa, el SiPreBA, las paritarias monopolizadas por la cuasi extinta UTPBA, redundaron en una seguidilla de paritarias a la baja que implicaron una pérdida del poder adquisitivo del salario de los trabajadores de prensa escrita del orden del 42% desde el año 2017. Semejante retroceso logró imponer una reforma laboral de hecho por la vía del pluriempleo obligado.
La situación en las otras ramas como la TV no es muy distinta ante la negativa de la UTPBA de abordar una negociación única que ha sido revertida en parte por la acción de las comisiones internas del SiPreBa en los medios televisivos. En esa rama en particular, el salario de convenio está vinculado al salario mínimo que, este gobierno y los anteriores dejaron derrumbarse con la complicidad de la burocracia sindical de la CGT y la CTA tirando para abajo el piso sobre la base del cual negociar. La rama de radios es tierra arrasada por las patronales y abundan los contratos precarios, los salarios de hambre y los despidos.
Así las cosas, la mayoría de los trabajadores de prensa percibimos salarios que nos ubican por debajo de la línea de pobreza. El escenario hacia adelante no resulta auspicioso a partir del acuerdo con el FMI que firmó el gobierno con el concurso de la oposición de derecha para pagar una deuda a todas luces fraudulenta y que plantea tarifazos, ajuste fiscal y, entre otras cosas, más devaluaciones que, sabemos, conspiran contra el salario de los trabajadores. Además, el propio acuerdo induce a la revisión de los convenios de trabajo para, mediante el eufemismo de ‘adecuarlos a las nuevas tecnologías’, avanzar sobre el salario e imponer la multitarea.
La guerra en Ucrania, además, complica el escenario por el impacto en el precio de los alimentos y, por su impacto en la balanza de pagos local, dificulta el cumplimiento del acuerdo con el FMI que, por eso y haciendo uso del virtual co gobierno que han impuesto, reclamará mayores ajustes y reformas en las revisiones trimestrales que el gobierno aceptó.
Por eso es necesario apuntalar las reservas de lucha que, recurrentemente, se ponen de manifiesto en el gremio y, más que nunca, reforzar la independencia de nuestro sindicato con relación al gobierno y las distintas vertientes del oficialismo que buscarán coartar toda acción independiente de los trabajadores.
En una reunión entre funcionarios del gobierno, la conducción de la CGT y la UIA se impuso la voluntad de las patronales y se desestimó el otorgamiento de un plus salarial único para todos los trabajadores bajo convenio buscando fragmentar y debilitar el reclamo por la vía de las paritarias por sector. El gobierno, luego, dictó una resolución mediante la cual estableció el adelantamiento de la convocatoria a las discusiones paritarias en aquellos gremios en los que aún no se hubieran producido. Si bien en el listado de 26 sindicatos alcanzados por la norma que difundió la cartera laboral no figura el gremio de prensa, la letra de la resolución sí nos involucra.
Necesitamos un programa y un plan de lucha para comenzar a revertir el retroceso de los últimos años y conquistar en forma definitiva la personería de nuestro sindicato.
Un programa que comience por reclamar la apertura de las discusiones ahora mismo con la presencia del SiPreBA y la recomposición inmediata del salario con un incremento de emergencia que lleve el salario testigo del redactor a un valor equivalente a la canasta básica y que, ante la incertidumbre generada con los precios, además, instaure la indexación automática de los salarios por la inflación porque el salario de los trabajadores de prensa ya no tolera más retrocesos.
La Naranja de Prensa
7/4/2022